Bagel de salmón y queso philadelphia

Pues para los que no lo sepan, un Bagel es un aro de pan que se hace enrollando primero la masa en forma de círculo con un agujero en el medio, luego se cocina en agua caliente a punto de hervir y después se hornea. El bagel es el único producto de pan que se hierve en agua antes de ser horneado. Eso es lo que le da su particular textura y lo que hace que su corteza brille.

Son muy populares en Nueva York y cuando estuve, había tiendas especializadas que sólo vendían bagels en todas sus variedades (de cebolla,mantequilla, sésamo,centeno...) y con todos los rellenos que uno se pueda imaginar.

Te aseguro que no te comerás sólo uno...

Para unos 5-6 Bagels:

125ml. de agua

125 ml. leche entera

15gr. levadura fresca

450 gr. harina

2 cucharaditas de sal

1 cucharadita de azúcar

30 gr. mantequilla derretida

1 huevo

semillas de amapola o sésamo

unas lonchas de salmón ahumado

queso philadelphia

Mezclamos el agua y la leche. Calentamos 60 ml. de la mezcla (no a más de 30º).

Ponemos la levadura en un bol pequeño y le añadimos los 60 ml. Dejamos reposar unos minutos hasta que salgan burbujitas.

Mezclamos la harina, la sal y el azúcar. Hacemos un hueco en el centro y añadimos la levadura, la mezcla de agua y leche restante, la mantequilla derretida y la clara de huevo batida. Mezclamos todo y amasamos un buen rato.

Colocamos la masa en un bol y lo cubrimos con un paño húmedo frío. Dejamos reposar en un lugar cálido de la cocina 1 hora.

Desinflamos la masa con un golpe de puño y dividimos en 6, 8 o 10 porciones (depende de los bagels que queramos hacer).

Formamos bolas y les hacemos un agujero en medio con el dedo espolvoreado en harina. Dejamos reposar 10 minutos.

En esos 10 minutos, hervimos agua en una olla profunda. Nada más empiece a hervir, metemos los bagels uno a uno 15 segundos.

Los colocamos en una bandeja de horno forrada con papel vegetal. Batimos la yema del huevo con un poco de agua y pincelamos los bagels.

Espolvoreamos con las semillas de amapola o sésamo y horneamos unos 25 minutos a 220º.

Dejamos que se enfríen una media hora antes de rellenarlos con el salmón y el queso.

* Inventamos uno al que bautizamos como "Bagel Ibérico", relleno de ...pringá!

Albóndigas con salsa de cebolla,manzana y curry

Otra manera de cocinar albóndigas, muy fácil y con una salsa riquísima que también podemos utilizar para acompañar otros tipos de carne. Espero que os guste!!

1 bandeja de albóndigas preparadas o 250 gr. de carne de cerdo y 250 gr. de ternera
2 manzanas
2 cebollas
1 huevo
1 bote de leche ideal
50 ml.coñac o brandy
curry en polvo
harina
aceite
sal y pimienta negra molida


Si optamos por hacer las albóndigas nosotros, mezclamos en un bol los dos tipos de carne y sazonamos con sal y pimienta y mezclamos con el huevo batido.

Formamos las albóndigas, las pasamos por harina y en una sartén las freímos en un poco de aceite lo justo para que tomen color por fuera pero que no estén totalmente cocinadas por dentro. Escurrimos el exceso de aceite y las reservamos.

Cortamos la cebolla en juliana junto con la manzana y las rehogamos en una sartén con un poco de aceite hasta que empiecen a tomar color. Añadimos el coñac, la leche,1/4 de agua y el curry.

Dejamos cocer 10 minutos y añadimos las albóndigas.

Rectificamos de sal y dejamos que se terminen de hacer las albóndigas en la salsa unos 10-15 minutos más.

Podemos servir acompañado con unas patatas fritas o con arroz.

Ensalada de canónigos con pollo, queso Brie y vinagreta de miel

Algunos me dicen que conociéndome no saben cómo he tardado tanto en subir alguna receta de lo que más me gusta,después del chocolate,claro: la ensalada.
Perfecta para acompañar cualquier plato o como comida principal, como en este caso, existen una infinita variedad de clases de lechugas que podemos mezclar con casi cualquier ingrediente y aderezar con muchísimas salsas o vinagretas.

Los canónigos, de sabor más intenso y color más oscuro que la lechuga, son una gran fuente de vitaminas del tipo A,B,C,E y de ácido fólico convirtiéndolo en un gran aliado para la salud.A ésto debemos añadirle su contenido en potasio y por supuesto de hierro.
Al principio puede dar la sensación de estar comiéndote la maceta del salón, pero después descubrirás su textura suave y su agradable sabor.

1 paquete de canónigos
1 pechuga de pollo
queso brie
un puñado de nueces
un puñado de pasas
unas uvas
vinagre de módena
miel
sal


Es tan fácil como hacer la pechuga a la plancha. Yo la aliño un poco con sal,pimienta negra molida y unas gotas de zumo de limón.

Echamos la cantidad que queramos de canónigos en una ensaladera, cortamos unos trozos de queso Brie y los añadimos. Hacemos lo mismo con las nueces, las pasas y las uvas.

Para la vinagreta, en un vaso, mezclamos unas cucharadas de vinagre de módena con unas de miel y batimos bien hasta que la miel quede bien ligada al vinagre.Hay quien utiliza aceite, pero a mí me parece que queda mucho más ligera si lo omitimos además de aportarle menos calorias. La cantidad de cada ingrediente es al gusto. A mí, por ejemplo, me gusta que sepa más ácida que dulce, por lo que le añado más vinagre que miel. Hay que buscar la proporción perfecta que más s guste.

Rociamos la ensalada con la vinagreta y listo.

Pescado frito con rebozado de cerveza y salsa tártara

Aquí teneis otra receta de pescado para que no nos aburra tanto comerlo. En esta ocasión he utilizado bacalao que me encanta, pero también quedará muy bien con merluza, por ejemplo.

Acompañé el pescado con una ensalada de lechuga, queso brie, zanahoria y uvas.

Para cuatro personas

4 filetes de pescado blanco

75 gr. de harina preparada*

80 ml.zumo de limón

160 ml. de cerveza

240 ml.aceite de oliva

Harina preparada:

225 gr. de harina

2+1/4 cucharaditas de levadura en polvo

3/4 cucharadita de bicarbonato

Salsa tártara:

240gr. mayonesa

22ml.zumo de limón

45 gr. pepinillos picados muy finos

30gr. cebolla picada fina

una pizca de azúcar

2 cucharaditas de eneldo

sal y pimienta negra

Secamos los filetes de pescado y los empanamos con 75 gr. de la harina preparada.

La restante la mezclamos en un bol con el zumo de limón, la cerveza y el aceite.

Mojamos bien los filetes de pescado en la mezcla y freímos en una sartén con aceite caliente unos 4 o 5 minutos por cada lado.

Servimos el pescado caliente con la salsa tártara.

Para hacer la salsa, sólo hay que mezclar todos los ingredientes.

Una vez frito el pescado, podemos quitarles el exceso de aceite dejándolos sobre papel absorbente de cocina.

Strudel de manzana

El Apfelstrudel o Strudel de manzana, es un postre típico de la cocina austríaca y del sur de Alemania. Servía en la antigüedad como un alimento para la gente pobre y es muy posible que sus raíces se sitúen en el árabe y armenio Baklava.

Este dulce debe servirse un poco caliente con algo de azúcar glass y canela espolvoreadas sobre él y si le añadimos unas natillas calientes, que es como yo lo probé en Alemania, estará increíble.

1 lámina de hojaldre

120 gr. de azúcar

200 gr. de manzana

2 cucharadas de canela

30 gr. de mantequilla

1 puñado de pasas

pan rallado

1 huevo

Precalentamos el horno a 170º y ponemos las pasas a remojar en agua.

Disponemos media lámina de hojaldre en la placa del horno forrada con papel vegetal.

Espolvoreamos el hojaldre con pan rallado para que éste absorba los jugos de la manzana.

Disponemos encima del hojaldre las manzanas en láminas finas. Espolvoreamos con el azúcar, la canela y las pasas escurridas.

Derretimos la mantequilla y regamos con ella nuestro relleno.

Cubrimos con la otra mitad de la lámina de hojaldre y sellamos bien los bordes para que no se salga el relleno.

Pintamos con el huevo batido y espolvoreamos con un poco de azúcar glass.

Horneamos unos 20 minutos o hasta que veamos que el hojaldre está hecho.

Dejamos enfriar unos 10 minutos y servimos aún caliente.

Hachis parmentier

Este plato es una especialidad gastronómica francesa. No os asustéis, la palabra francesa "hachis" significa en español "picado, desmenuzado" y es que este plato tan sencillo no es más que una capa de carne picada cubierta con otra de puré de patata.

Cuenta la historia que debe su nombre al nutricionista francés Antoine-Augustin Parmentier que promocionó el consumo de patata, importada desde hacía poco tiempo de América, y que no gozaba de mucha aceptación. Convencido de su valor nutricional para combatir la escasez de alimento en una época de hambrunas, se lo dió a probar al rey Luis XVI.

5oo gr. de patatas

250 gr. de carne picada de ternera

1 cebolla

2 dientes de ajo

1 chorrito de vino blanco

3 cucharadas de tomate frito

1/2 vaso de leche caliente

un poco de mantequilla

queso rallado para gratinar

sal, pimienta negra molida y nuez moscada

Pelamos las patatas, las troceamos y las ponemos a cocer en agua durante unos 25 minutos o hasta que estén blandas.

Mientras, vamos preparando la carne. Picamos la cebolla y la pochamos en una sartén con el ajo picado hasta que se doren. Agregamos el tomate frito. A continuación echamos la carne y la doramos. A mitad de la cocción añadimos el chorrito de vino blanco y cocemos hasta que se evapore.

Pasamos por el pasapuré las patatas cocidas. Se mezcla el puré con la leche y la mantequilla hasta que quede cremoso. Le añadimos la sal, la pimienta y la nuez moscada.

En un recipiente para el horno, colocamos una capa gruesa de carne y encima otra de puré de patatas. Espolvoreamos con el queso y lo cocinamos en el horno unos 20 minutos o hasta que se dore el queso.

Ya vereís que bien entra ésto un día de frio...

Yo cometí el error de hacerlo en una bandeja demasiado grande, por lo que no se me quedo tan compactado como hubiera deseado. Es preferible utilizar una bandeja más alta que larga para que a la hora de servir el pastel esté compacto y no se desborone mucho (algo es inevitable).

También ayuda que hagamos un puré de patatas más bien espeso.

Nueva cabecera

Pues resulta que hoy me he levantado con la sorpresa de que un amigo se ha currado esta chulísima cabecera para mi blog.

Gracias Andrés, eres un artista!!!

Cookies con chips de chocolate

Para hacerle honor a esas mil visitas, os dejo la receta de las auténicas cookies americanas; mis galletas preferidas.

Después de haber probado a hacer estas galletas con diferentes recetas e ingredientes os puedo asegurar que con ésta, sin lugar a dudas, es como quedan mejor.

230 gr. mantequilla

200 gr. de azúcar

220 gr. azúcar moreno

2 huevos grandes batidos

300 gr. de harina

215 gr. de harina de avena

1/2 cucharadita de sal

1 cucharadita de levadura en polvo

1 cucharadita de bicarbonato sódico

300 gr. chips de chocolate

1 cucharadita de estracto de vainilla

112 gr. de chocolate rallado

Precalentamos el horno a 180º.

En un cuenco grande,mezclar la mantequilla ablandada con el azúcar blanco y el moreno.

Añadir la vainilla y los huevos uno a uno. Batir bien.

En otro cuenco, tamizar la harina y la levadura. Añadir la sal, y el bicarbonato. Incorporar a la masa de mantequilla y azúcar.

Añadir la avena, los chips de chocolate y el chocolate rallado. Mezclar bien.

Formamos bolas y las vamos colocando en la bandeja del horno previamente forrada con papel vegetal.

Horneamos de 10 a 15 minutos o hasta que empiecen a tomar un color dorado.

Las retiramos del horno y las dejamos enfriar en una superficie lisa.

El chocolate rallado y el estracto de vainilla son dos ingredientes opcionales. Precisamente a éstas últimas no les puse el chocolate y en vez de estracto de vainilla le puse unas gotas de agua de azahar.

La harina de avena la encontraréis en cualquier herboristeria o semillería.

El tamaño de las bolas va a depender de lo grandes que queráis que os salgan las galletas. Con el calor, las bolas se derriten y toman la forma redonda de las galletas. Mi consejo es que no las pongais muy juntas en la bandeja del horno. Yo suelo hornear unas 9 en cada tanda para que no se peguen.

Por último comentar que es importante que no las dejeis mucho tiempo al horno porque se queman muy rápido y aunque creaís que aún les falta, estas galletas se siguen haciendo incluso cuando ya las hemos sacado. En cuanto que las veaís ya con su forma y empiecen a dorarse, sacádlas y dejádlas enfriar en una superficie lisa.

1000 visitas, gracias a tod@s!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Sólo quería deciros que me hace tremendamente feliz el hecho de haber recibido 1000 visitas en los escasos tres meses de vida de Cookie Monster at work, gracias!!!!

Un besazo enorme para mis seguidores, a los que conozco y a los que no. Gracias por haber dedicado esos 5 minutos a registraros y darme la alegría de ver como aumentaba vuestro número.

Muchísimas gracias a los que me dejais comentarios tanto aquí como en facebook cuando subo alguna receta, me alegrais el día pero también quiero que sepáis que quiero que me comentéis mucho más!! Gracias, gracias también a los que me decís que habeis probado ya a hacer alguna receta pues ese es el verdadero propósito de este blog y a los que aún no se han atrevido pero me dicen que se comerían las fotos. Ojalá os esté aportando nuevas ideas y ampliando vuestro repertorio gastronómico, sobre todo a los recién independizados que echaréis de menos las comiditas de mamá ;)

Especial mención a mis padres, mi hermana y mi novio por estar siendo unos verdaderos conejillos de indias. Es de agradecerles que se coman todo lo que preparo incluso cuando me sale para tirarlo directamente a la basura, más duro que un ladrillo o cuando me paso con la sal. Una vez le eché tanto bicarbonato sódico a un bizcocho que a mi padre le estuvo picando la lengua un buen rato y lo peor es que no sabía por qué! hasta que no llegué a casa y se lo expliqué se pensaba que habría confundido la cayena con la canela (estuvo a punto de pasarme una vez...), pero sus críticas son siempre muy constructivas y me animan a seguir preparando y subiendo recetas.

También quería tener unas palabras de agradecimiento para mis tres maravillosos pinches de cocina Trapo, Bruno y Audry. Gracias por no dejarme sola en la cocina ni un sólo minuto, por estar siempre tan atentos a todos mis movimientos y por ser las mejores aspiradoras que podría desear tener. Vosotros si que sois mis mejores gourmets.

Pues lo dicho, que me siento muy feliz por vuestra participación y que espero que sea siendo así por mucho tiempo. Os prometo que aún os quedan un montón de deliciosas recetas que ver y espero que cocinar!!, una vez más:

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡GRACIAS!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Sopa fácil de tomate

En estos días en los que se empieza a notar el frío, nos va apeteciendo tomar cosas calentitas, ¿verdad?. Esta receta es un clásico en casa aunque tengo que confesar que se la copié a la madre de mi novio...La hizo para un almuerzo un 25 de diciembre y no os imagináis como nos entonó el cuerpo esta sopita después de los excesos de la noche anterior.

Aunque no se parece en nada a la habitual sopa de tomate que cocinamos aquí en Andalucía (con hierbabuena y pan), está igual de buena o si me apuras, para mi gusto, mucho mejor.

Para cuatro personas:

25 gr. de mantequilla

1 cebolla cortada en cuadraditos

25 gr. de harina

1 lata de tomate triturado grande (800 gr. aprox.)

750 ml. agua

1 pastilla de caldo

1 hoja de laurel

1 cucharadita de sal

1 cucharadita de azúcar

1 cucharadita de pimienta negra molida

1 naranja pequeña

En una sartén honda, derretimos la mantequilla con una gota de aceite y rehogamos la cebolla.

Cuando empiece a cambiar de color, añadimos la harina, damos unas vueltas con una cuchara de madera para que se pegue bien a la cebolla e incorporamos el resto de ingredientes menos la naranja.

Bajamos un poco el fuego y dejamos cocer unos 20 minutos tapándolo, pero no del todo.

Pasado el tiempo, retiramos del fuego, quitamos el laurel y pasamos la sopa por la batidora.

Rallamos un poco (no mucho que amarga) la cáscara de la naranja y espolvoreamos la sopa.

Más o menos es una cucharadita de sal y otra de azúcar para rectificar la acidez del tomate, pero ésto es al gusto de cada uno. Hay personas a las que le gusta más dulce y otras a las que no. Lo mejor es que lo probéis y decidáis qué necesita.

Lo de pasar la sopa por la batidora es opcional. Yo no lo hago porque me gusta encontrarme los trocitos de cebolla.

No dejeis de probarla con la ralladura de la cáscara de naranja porque le dá un toque espectacular.