Hay pocos olores tan deliciosos como el que se filtra por mi ventana cuando mi madre cocina pollo al horno los domingos, en especial cuando he estado de parranda hasta altas horas de la madrugada y digamos que vuelvo con el estómago "algo perjudicado". Este pollo es capaz de resucitar a un muerto.
Os dejo esta receta que es facilísima y no os dejeis engañar por su sencillez...en casa hay tortas por mojar pan en la salsa.
1 pollo partido en trozos pequeños y sin piel de 1 Kgr. aprox.
1 litro de vino blanco
2 pastillas de caldo de ave
aceite de oliva
Un día antes ponemos a macerar el pollo en un recipiente junto con el vino y las pastillas de caldo desmenuzadas.
Al día siguiente, lo vertemos todo en un recipiente para el horno y regamos con un hilito de aceite de oliva.
Lo metemos al horno una media hora a 180º-200º. Sacamos y le damos la vuelta a las piezas de pollo, dejándolo otra media hora o hasta que veamos que se dora.
Fácil, no???
jarl! esto tiene muy buena pinta!! cuándo nos vas a invitar a probar el delicioso pollo al horno???? (si, ya sé que lo puedo cocinar yo, pero no es lo mismo! ^^ )
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