Guacamole

Como no me suele gustar mucho la carne de las barbacoas, siempre ando llevándome algo para no morirme de hambre y el guacamole suele ser mi opción más común, sobre todo en verano ya que es muy fácil de preparar, está bueníiiiisimo y es muy fresquito.

Esta receta la aprendí de mi padre que de vez en cuando nos hace una "cena mexicana" con burritos, frijoles y este guacamole casero que nada tiene que envidiar al que preparan por ahí.

Lo auténtico es comerlo con nachos, pero en este caso no tenía y lo que hice fue tostar unas rebanadas de pan y cortarlas en triángulos.

2 aguacates maduros

1/2 cebolla

1/2 tomate

el zumo de medio limón

pimienta negra

sal

unas gotas de tabasco (si os gusta el picante)

aceite de oliva

Pelamos los aguacates y le sacamos el hueso.

Ponemos los aguacates en un bol y con un tenedor los vamos aplastando hasta que se queden bien triturados.

Le añadimos la media cebolla y el medio tomate picados en cuadraditos pequeños.

Agregamos el zumo de limón, la sal, la pimienta, el tabasco, si se quiere, y mezclamos todo bien.

Lo metemos en el frigorífico y a la hora de servir lo rociamos con un chorrito de aceite de oliva.