Este plato lo probé por primera vez en casa de los abuelos de mi novio, que no sé si lo he contado ya pero cocinan de maravilla.
Más o menos fue fácil descifrar la composición del plato, pero aún así busqué la receta más parecida en Internet y voilà!, buenísimo y barato, fácil de hacer y dura un montón en el frigo.
y además de todo esto...estaremos comiendo pescado!!!!!!
y además de todo esto...estaremos comiendo pescado!!!!!!
Para 4 personas:
1 filete grandecito de salmón sin espinas
2 filetes de pescado blanco sin espinas (yo utilicé filetes de pescada congeladas)
1 bolsita de puré de patatas
20 gr. mantequilla
20 gr. de harina
100 ml. caldo de pollo
100 ml. vino blanco
100 ml. nata líquida para cocinar
sal, pimienta negra molida y nuez moscada
Cocemos el pescado en una olla con agua hirviendo y un poco de sal unos minutos. Lo dejamos enfriar un rato y lo desmenuzamos comprobando que no tenga ninguna espina.
En una sartén, derretimos la mantequilla a fuego suave. Añadimos la harina y mezclamos bien con ayuda de unas varillas. Tostamos la harina unos 2 minutos sin dejar nunca de remover.
Agregamos el caldo de pollo, el vino y la nata. Removemos sin parar subiendo un poco el fuego hasta que hierva. En ese momento, bajamos el fuego y añadimos sal, pimienta negra molida y nuez moscada al gusto.
Cocinamos durante 10 minutos removiendo de vez en cuando.
Ponemos el pescado desmenuzado y sin espinas en una fuente de horno, cubrimos con nuestra salsa y encima añadimos el puré de patata que debe estar más bien espeso para que lo cubra bien todo.
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