Ahí va mi primera receta.
He elegido este plato porque en mi casa gusta mucho y se come casi semanalmente. Es muy fácil de elaborar, perfecto para cuando tenemos un par de berenjenas que llevan días deambulando por nuestro frigorífico y no sabemos qué hacer con ellas.
Para cuatro personas:
2 ó 3 berenjenas (depende del tamaño)
2 latas de atún
1 puñado de aceitunas negras
1 cebolla
1 bote de tomate frito
1 paquete de queso rallado para fundir
sal, pimienta negra y orégano
Lavamos las berenjenas y las cortamos en rodajas ni muy finas ni muy gruesas.
Las ponemos en un recipiente para microondas con un poquito de sal y las cocemos. Yo las pongo unos 8 minutos a máxima potencia. Tienen que perder un poco de agua y adquirir un color marroncito...ésto es pobrar hasta cogerle el puntillo.
Mientras, en una sarten pochamos la cebolla (ésto consiste en poner un poco de aceite en una sartén y sofreir la cebolla con un poco de sal hasta que la veamos blandita).
A continuación, agregamos el atún, el tomate frito y una pizca de pimienta negra. Sofreimos un par de minutos.
En una bandeja de horno vamos poniendo una capa de rodajas de berenjenas.
Encima, vertemos el sofrito y esparcimos unas aceitunas negras cortadas por la mitad y el orégano.
Cubrimos el sofrito con otra capa de berenjenas y espolvoreamos esta última con el queso rallado especial para fundir.
Lo metemos en el horno unos 20 minutos a 180 grados (más o menos hasta que el queso se funda y el tomate empiece a hacer burbujitas) y listo para comer.
te salieron wenas wenas! las he probado esta nuit!=)
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